Domingo Gil Blanco, más conocido como Mingo Gil, nació el 10 de abril de 1960, en Montbrió del Camp (Baix Camp). Ex-piloto catalán de velocidad que destacó en competiciones estatales durante la década de los ‘80, dándose a conocer en 1978, a la edad de 18 años, ganando la primera edición del Critèrium Solo Moto.
Más tarde, consiguió el Campeonato de España de resistencia en el año 1980 y un subcampeonato de España de velocidad en el 1982. En el año 1985 y 86, disputó el Campeonato del Mundo de Velocidad como piloto oficial del equipo Autisa, en la categoría de 80 c.c.
Mingo, como muchos otros pilotos nacionales, ha formado parte de las filas de la escudería JJ y JJ Cobas.
Uno de los premios por ganar el Criterium Solo Moto, era tener una plaza asegurada en el equipo JJ en 1979, para disputar el Campeonato de España de 250 c.c., pilotando una Siroko con motor Yamaha TZ 250 c.c., junto a su compañero de equipo Pere Xammar.
Hablando con Mingo, me contaba que ese año, en el ‘79, estuvo viviendo un par de meses en casa de Jacinto Moriana con él y su familia. Luego se fue a vivir a un piso que alquiló Jacinto en c/ Travessera de les Corts con Numància, junto a Pere Xamar, Toni Gorgot y la hermana de Gorgot.
En 1980, la escudería JJ, pasa a llamarse JJ Brando, y Mingo Gil disputa el Campeonato de España junto a los pilotos Josep Maria Mallol y Carlos Cardús. Gil y Cardús pilotando montura Siroko y Mallol con Yamaha TZ.
Ese mismo año, junto a su compañero Cardús, también disputaron el Campeonato de España de Resistencia con una Montesa 360 c.c., consiguiendo proclamarse campeones en la categoría de hasta 500 c.c.
En 1981 siguió con JJ Brando con los mismos compañeros y la misma moto, esta vez, la Siroko montaba motor Rotax en vez de Yamaha. Fue un año que disputó pocas carreras debido a que estaba haciendo el servicio militar pero con buenos resultados.
En 1982, ficha por el equipo "Le Mans" para competir junto a Benjamín Grau con una Yamaha TZ 250. Fue una buena temporada para él, buenos resultados y consiguiendo el subcampeonato. El campeonato se lo llevó Carlos Cardús con la escudería JJ.
Como ya sabéis, en los inicios de la escudería JJ, se corría con monturas de otras marcas. No fue hasta el año 1984, cuando Antonio Cobas fichó y pasó a formar parte de la escudería JJ, que se empezaron a diseñar y fabricar sus propias monturas. A partir de ese momento, la escudería pasó a llamarse JJ Cobas.
En 1984, a media temporada, ficha por el equipo JJ Cobas para disputar el CEV 250 c.c como compañero de equipo de Carlos Cardús.
Si tenéis la suerte de seguir su cuenta de Facebook, podréis disfrutar de numerosas anécdotas, recortes de prensa y sus propias vivencias como piloto. Una de ellas, cuando explica su fichaje en el año ‘84 con JJ Cobas y con la intención de ayudar a Carlos Cardús para conquistar el título del campeonato:
Domingo “Mingo” Gil: “Regreso al CEV 250 c.c., mi categoría preferida.
En esa cilindrada, sentía un equilibrio absoluto entre piloto y máquina.
Quizás me extenderé un poco en este comentario, creo que la cuestión merece esta explicación:
Al salir de la escudería Parra, hice unas carreras con la obsoleta Yamaha TZ del año ‘82. Pedí repuestos nuevos a SEMSA-YAMAHA, “otra vez”, a través de FOLCH ENDURANCE a cambio de hacer las Series con la Yamaha FJ 1.100 c.c.
Solo llegó un recambio usado y desechado por Juan Garriga, que aquel año “disfrutaba” de una TZ que le cedió el equipo SEMSA-YAMAHA.
En la carrera de Tarragona (Riu Clar), se fisuró un escape de mi TZ, perdiendo potencia irremediablemente. En La Línea, me presenté en remolque con unos amigos que no me querían dejar tirado. Bajo la sombra del Peñón, cenando una sabrosas sardinas a la brasa en un chiringuito de playa con mi gente, me di cuenta que aquello no llevaba a ninguna parte. Y pensé… ahora qué hago? Otra vez la maldita pregunta, se suele decir que cuando tocas fondo, te levantas. Dándole vueltas al tema, se me encendió la luz!
Carlos Cardús se estaba disputando el campeonato del CEV 250 c.c
con Juan Garrriga, estando estos, igualados a puntos. La escudería JJ Cobas, disponía de dos JJ Cobas TR1 250 c.c, “teóricamente”, Cardús no necesitaría la segunda moto.
Y si le pido a Jacinto Moriana, patrón de JJ Cobas, la segunda moto para terminar la temporada con el único objetivo de ayudar a Carlos Cardús a ganar el título?
Me presenté en la tienda de JJ, en la calle Girona 57 de Barcelona, para hablar con Jacinto y explicarle mi propuesta. Unos pocos minutos después, no hicieron falta más, me dijo: “La próxima semana vamos al Jarama, ven con nosotros, no te preocupes por nada. Me parece una idea genial.“
Y así sucedió, alivio por mi parte porqué salvé mi temporada en el CEV 250 c.c con un gran equipo, una moto competitiva, y porque regresaba a mi “equipo”, la escudería donde empecé!
Regresé a casa y con un gran final feliz, a mi “surrealista” temporada 1984.
Gracias Jacinto!”
En otro relato de Mingo, explicaba una anécdota sobre este mismo año 1984 y su fichaje por FOLCH ENDURANCE para participar en el campeonato de Motociclismo Series en la categoría Siluetas:
Domingo “Mingo” Gil: “Contaré una anécdota que seguramente cayó en el olvido muy pronto pero que contiene una moraleja interesante.
En la primavera del 84 , cuando JJ Cobas tenía bastante avanzado el desarrollo de la JJ Cobas BMW (la mal llamada afeitadora por ser patrocinada por Braun Afeitadoras) , para participar en las Motociclismo Series en la categoría Prototipos , Jacinto Moriana el patrón del equipo , contactó conmigo para ofrecerme la plaza como piloto oficial del equipo.
En esos momentos había salido de la Escuderia Parra y tenía un futuro muy negro , por lo tanto y como era de esperar , no lo dude ni un minuto!!
Unas semanas después mi paisano Josep Maria Folch , de FOLCH ENDURANCE, me llama para ofrecerme el asiento de la novísima YAMAHA FJ 1100 para hacer el mismo campeonato pero en la categoría Siluetas.Estarás respaldado por una fábrica..por YAMAHA !! , me dijo Josep Maria.
Vaya,..tanta miseria arrastrada y ahora se me rifan!!
Y le dije a Josep Maria que no , porque había acordado con Jacinto correr con la JJ Cobas BMW.
A los dos días se me encendió la luz, llamé a Josep Maria y le dije: si me consigues repuesto de Yamaha para mi TZ para continuar el CEV de 250 cc , firmo.
Él me dijo: haré todo lo posible.
No me quedó otro remedio que confiar en él.
Hablé con Jacinto Moriana , le argumenté mis necesidades , lo entendió perfectamente y me dijo: No te preocupes Domingo , haz lo que tu creas más conveniente para ti.
El acierto del resultado con la FJ es sabido y no tuvo discusión.
Pero el repuesto de la TZ nunca llegó, salvo algunas piezas usadas desechadas por Juan Garriga de su flamante TZ 84.
Al cabo de unos meses, dada mi precaria situación de aquel momento que sufría con la vieja y desfasada TZ, llamé a la puerta de JJ Cobas para proponerle a Jacinto que me prestara la segunda moto de Carlos Cardús para terminar el CEV, con la condición de ayudar a Carlos a ganar el título.
La moraleja ? La importancia de tener las puertas abiertas donde vayas.
Si Jacinto hubiese sido una persona rencorosa por haber menospreciado su ofrecimiento y yo no hubiese sido honesto con él , quizás no hubiese pilotado jamás una JJ Cobas.
Y esto es lo que me hubiese perdido…”
En la primera carrera que disputó con la JJ Cobas, en el circuito del Jarama, los resultados fueron más que satisfactorios para todos, consiguiendo finalizar segundo, por detrás de su compañero de equipo, Carlos Cardús. Un fin de semana perfecto para los objetivos de la escudería, con sus dos motos y pilotos oficiales, quedando primero y segundo. Y teniendo en cuenta que el principal rival de Carlos Cardús para conseguir el Campeonato, Joan Garriga, se fue al suelo y no puntuó.
En una publicación de Mingo en sus redes sociales, comentó esto sobre esa JJ Cobas TR1: “Solo una cosa… con aquella moto descubrí una nueva dimensión a los grados de inclinación en paso por curva, que anteriores motos no me lo habían permitido..
Dios… que fácil y bonito era pilotar esa moto !!
Y como corría!!”
En una entrevista que le hicieron a Mingo para la revista Solo Moto, el titular de esta era “Gil; “he estado toda la carrera con una tensión nerviosa tremenda”” donde explicaban la gran actuación del piloto, lo mucho que le ilusionaba poder participar en el Superprestigio a los mandos de una JJ Cobas oficial idéntica a la de su compañero Carlos Cardús, y que a buen seguro seguiría pilotando el resto de carreras que quedaban ese año.
Domingo “Mingo” Gil: “He tirado al principio para mantener el ritmo, pero después cuando Garriga y Toni Garcia han desaparecido no he querido entrar a jugar con Carlos Cardús, porque eso se puede hacer cuando estás, muy, muy seguro de tu máquina y yo no lo estaba. He querido asegurarme, porque puede suceder cualquier cosa. Un toque entre los dos inconscientemente y todo el éxito se hubiera podido convertir en un desastre. Era una gran responsabilidad la que teníamos. La moto es maravillosa, pero es tan diferente a lo que yo había conducido hasta el momento. Te vas a reír, pero ayer en la primera sesión de entrenamientos (era la primera vez que la probaba), se me ahogaba en todos los ángulos. El motor gira muy arriba y me he tenido que acostumbrar. Además de la posición, vas muy apoyado delante. Es distinto, todo es diferente.
He rodado a 36 en mi mejor vuelta, pero no teníamos necesidad de ir más rápido. Fue una lástima no poder entrenar el viernes, porque me hubiera ido muy bien. La verdad es que el pensar en que me podía equivocar me ha hecho estar con una tensión nerviosa tremenda a lo largo de la carrera.”
Hay que tener en cuenta dos detalles importantes, el primero, hacer un segundo puesto con una moto muy diferente a la que has pilotado hasta el momento y el segundo, la diferencia de kilómetros encima de la moto (no solo de la JJ Cobas en concreto). En esa época, una de las mayores diferencias entre un piloto que disputaba el mundial respecto a uno que solo hiciera el CEV, significaba una diferencia brutal de kilómetros encima de la moto.
También, recordar que las salidas de las carreras, se hacían con la moto parada. Los pilotos tenían que empujarla y arrancarla. Para un piloto de la altura y el físico de Mingo, significaba una desventaja respecto a pilotos más altos y corpulentos.
Pero así eran las carreras, y Mingo consciente de ello, entrenó bien las salidas aunque no siempre dieron buenos resultados.
En el caso de su segunda carrera con la JJ Cobas TR1, en Guadalajara, los frutos de esos entrenos dieron su resultado y salió como un cohete. Lideró la cursa hasta el ecuador de esta, momento en que su compañero de equipo Carlos Cardús, lo alcanzó.
Estuvieron rodando juntos hasta que el motor Rotax de la JJ Cobas de Mingo, gripó.
Una lástima, se podría haber repetido el éxito de la cursa anterior, con los dos pilotos oficiales de la escudería en el podio.
Son cosas que pueden suceder en las carreras, ya se sabe, y en el caso de la moto de Gil, su motor Rotax tenía ya muchos kilómetros.
Otro GRAN resultado del pilotaje de Mingo que no se culminó por la mala suerte y un motor demasiado rodado.
Llegó la última prueba del Campeonato de España celebrada en el circuito de Calafat, donde Mingo, culminó la temporada con una merecidísima y esperada victoria.
Cardús se había fracturado la clavícula en la anterior carrera que se disputó en el circuito del Jarama, y en los entrenos del sábado, tuvo una nueva caída, dañándose nuevamente. Lo que significó que no podía revalidar el título de Campeón de España y se lo dejaba en bandeja a Joan Garriga.
Mingo pasó a ser el primer piloto de la escudería y todo el equipo se volcó en él, Jacinto Moriana, Antonio Cobas, Ginés Guirado y Luis Alberó.
Mingo voló con la JJ Cobas TR1!!
Esta fotografía fue tomada por Javier Herrero, director de la revista Motociclismo, en Calafat. Una gran fotografía y seguramente, la que muchos hubiesen querido poder firmar. Los dos ganadores del día, Mingo Gil por haber ganado con autoridad la última prueba del Campeonato de España y Joan Garriga, que con su cuarta plaza, le sirvió para proclamarse Campeón de España.
Ese mismo domingo, se disputaba el Superprestigio y la JJ Cobas que pilotaba Mingo, con la que había ganado la última prueba del CEV, se vendió a un piloto que la pagó muy bien. Por un momento, Mingo pensó que se quedaba sin moto para disputar la mítica carrera diseñada y creada por Solo Moto y Jaime Alguersuari.
No me quiero ni imaginar la cara que se le debió de quedar a Mingo, pero como él mismo explica, fue una anécdota más que acabó con un buen final:
Domingo “Mingo” Gil: “La moto que piloté el sábado en la carrera del CEV , el equipo decidió venderla a un piloto que llegó con las manos llenas para comprarla.
Yo sorprendido..le dije a Jacinto Moriana patrón del equipo, y ahora qué hago? (esa interminable pregunta que siempre me hice a lo largo de mi carrera).
Jacinto me contestó…no te preocupes Domingo, dentro de media hora tenemos una reunión con el comprador. Limítate a actuar como el gran perjudicado y "GRAN" perdedor de esta jugada. De lo demás me encargo yo.!!
Y así fue, reunión a tres. Jacinto expuso al comprador que me cediera la moto para el Superprestigio a cambio de una rebaja en la venta. Si sucedía algo grave, JJ Cobas se haría responsable de reparar los daños ocasionados (como sucedió pero esto da para otro capítulo).
Jugada maestra de Jacinto Moriana !!
Creo que invento el renting , desconocido en aquella época!!
Visionario por necesidad!!”
Como ya he comentado en muchas ocasiones, es importante conocer bien la historia de la escudería JJ, JJ Brando y JJ Cobas. No hay que olvidar, que aunque Jacinto Moriana era un soñador y un GRAN apasionado de la moto, la escudería nació y se financió con el objetivo de aumentar las ventas de motocicletas de los concesionarios JJ Automóviles. Jacinto, sabía que la mejor publicidad para su empresa, era crear la escudería y que los medios hablaran de ella. Con la incorporación de Antonio Cobas a la escudería y la fabricación de las JJ Cobas, nació una nueva oportunidad de seguir financiando el proyecto y soñando con algún día, llegar a ser Campeones del Mundo. Eso pasaba por la venta de las monturas JJ Cobas a otros pilotos, de aquí nacieron las JJ Cobas cliente, motos idénticas a las oficiales.